No más que títulos
Porque para despedirse uno tiene que decir Hola primero. Cuántos adiós habrán sonado en estas calles Cuánto daño se habrá hecho en ellas y en todas partes. Para olvidar puedes caminar, incluso viajar por el mundo Pero siempre existirá ese recuerdo, y la duda, te rondará un "quizá si..." El miedo a caer a lo desconocido, a la oscuridad, al vacío Y sientes la presión como si tuvieras una pistola contra tu cabeza Y debes mantener el equilibrio esperando la calma tras el viento que posa las hojas marchitas en la hierba. Pero todo vuelve, incluso un segundo adiós, y te das cuenta de que es imposible olvidar